Cómo almacenar correctamente los productos perecederos

A diferencia de lo que sucede con otro tipo de mercaderías, el almacenamiento de productos perecederos requiere mucho cuidado y es un proceso clave para reducir el crecimiento de microorganismos que puedan alterarlos.

Por eso, para garantizar una buena calidad a lo largo de la vida del producto y evitar potenciales daños a los consumidores, que provocarían una mala reputación de la marca, es necesario implementar una serie de cuidadosos métodos. Veamos cuáles son.

Características y cuidados especiales que requiere el almacenamiento de productos perecederos

Las mercancías perecederas sufren cambios en su composición con el paso del tiempo, a causa de agentes como la humedad, temperatura y presión, pudiendo estas alteraciones afectar su calidad y valor.

Si bien esto ocurre independientemente de los cuidados que se tomen, la implementación de métodos de almacenamiento que eviten daños, deterioro y contaminación, hacen posible que la pérdida no ocurra antes de tiempo. Estas técnicas incluyen, entre otras, lavado, clasificación, envasado, almacenaje, control de temperatura y pruebas de calidad.

Los lugares en los que se realiza el almacenamiento de productos perecederos también tienen que asegurar otras condiciones esenciales, relativas a la salubridad, eliminación de desechos y comercialización.

Se necesita asegurar un estricto control higiénico y sanitario, tanto de los propios productos, como del almacén en dónde se guardan y todos sus insumos. Asociado a la limpieza, hay que establecer un flujo de eliminación de desperdicios adecuado para que los desechos no afecten la mercadería en buen estado.

Los procedimientos de venta también deben apoyar los esfuerzos por almacenar los productos perecederos de forma adecuada. Por ejemplo, mediante la implementación del método conocido como FEFO (First Expires, First Out), se asegura que los productos con caducidad más cercana en el tiempo sean los primeros en venderse, evitando así que se deterioren en el almacén. 

Buenas prácticas para guardar los alimentos perecederos

La gama de productos perecederos es muy amplia, e incluye elementos como carnes, frutas, pescados, verduras, especias, granos, embutidos, flores y plantas y productos farmacéuticos, entre muchos otros. Todos ellos necesitan cuidados especiales, pero no iguales, por lo que es esencial conocer las particularidades de cada producto.

En el caso de las carnes, por ejemplo, la aparición de bacterias y otros microorganismos que la echan a perder se retarda controlando la temperatura. Cuanto más cerca de cero grados esté, menos probables son los riesgos.

Las frutas y verduras, por otro lado, también tienen que guardarse en un ambiente frío, pero no congeladas, para mantener su sabor y color, mientras que a los granos y semillas, los deterioran la alta cantidad de humedad en el producto almacenado, la elevada temperatura y humedad en el ambiente y la presencia de insectos, hongos, bacterias y roedores.

Condiciones básicas que debe cumplir el almacén

Control de accesos

El criterio de acceso a las áreas de almacenamiento de productos perecederos debe ser bien pensado, riguroso, controlado. Solamente deben poder ingresar empleados autorizados y debidamente capacitados.

Atmósfera controlada

Como mencionamos antes, cada producto requiere condiciones especiales. La humedad y temperatura, entre otros aspectos atmosféricos deben ser las adecuadas para cada caso.

Apilamiento correcto 

Tener un sistema de guardado que no bloquee la entrada de aire y favorezca su circulación es esencial para preservar los productos perecederos durante toda su vida útil.

Esquema de limpieza programado

Tanto las actividades a realizar como el programa de limpieza deben ser definidos en base a las necesidades de cada caso, y luego controlados.

Uso de uniforme apropiado 

Al manipular los productos se deben usar los uniformes apropiados para cada sector. Cumplir esta regla ayudará no solo al cuidado de los productos sino también a la salud del personal.

Como analizamos, el almacenamiento de productos perecederos requiere de experiencia, correctos métodos de planificación y monitoreo, pero si se aplican es posible garantizar la conservación correcta y la venta de mercaderías seguras y de calidad a los clientes.